LOS ESCLAVISTAS

Un malévolo mercader de esclavos se ha quedado sin cuerpo de seguridad, debido a una extraña enfermedad. El caso es que necesita sacar de la ciudad a un buen puñado de esclavos que acaba de adquirir a un muy buen precio. Como no tiene gente para defender la ruta, ha decidido contratar a una banda de la ciudad. El mercader es un hombre sin escrúpulos y no le importa de qué clase de seres este compuesta la banda. Por su parte, otra banda ha recibido el chivatazo de que una banda de esclavistas lleva esclavos fuera de la ciudad y que no está demasiado protegida. Esa puede ser una gran oportunidad para ser héroes, o para conseguir un buen puñado de esclavos que revender.

El miércoles quede con Jonathan para jugar una partidilla y enseñarle un poco como va el Mordheim. Está probando bandas, ya había jugado con Piratas y esta vez decidió intentarlo con los Skavens.

La misión consiste en intentar abandonar el tablero con el mayor número de esclavos vivos posibles. Como la idea era centrarnos en el reglamento y no en la misión no comentaré el resultado final de la partida. Decidí jugar con 1 Caudillo, 1 Chamán, 2 Bestigor , 2 Gors y 5 Perros. Jhonathan lo hizo con 1 Asesino, 2 Skavens Negros, 1 Brujo, 2 Acechantes y 3 Alimañas.

La partida estuvo divertida y creo que en lo que interesaba (reglas), fue bastante inspiradora. Como siempre os dejo algunas fotos, la verdad es que la caravana de esclavos no avanzó gran cosa, ya que en el primer turno se dió la voz de alarma, pero la colocación de mis bestia (yo era el defensor) propició que no muchos esclavos pudieran salir dispersos. Alargamos el juego más allá del chequeo fallido de retirada (insisto, interesaba foguear las reglas) y , volviendo a las fotos, no apreciareis muchos cambios en los movimientos pese a que jugamos unos 7 turnos.

Primer turno, la caravana empieza su marcha ignorante de lo que le aguarda...

Comienzan las hostilidades.

Algunos valientes (¿?) Skavens se acercan timidamente  a cargar contra las bestias.

Las bajas una vez fallado el chequeo de liderazgo, o sea, fin de la partida.

 Vista general de la mesa al finalizar.

Lo primero que tenía que haber hecho es pedir perdón por las fotos. Me dejé la cámara en casa y las hice con la tablet... así salieron.

Este escenario me encanta, tiene un montón de opciones y la escenografía extra (los carros) son marca de la casa, mal está el decirlo, pero me encanta como me quedaron. Algún día los postearé por separado.

Ya sólo me queda esperar a que a Jonathan le haya gustado el juego y así lo pueda sumar a mi lista de adversarios para pegarme de tortas :)